AMO A DIOS
Autor del Poema: Nicolás de la Carrera
Amo a Dios y le siento
en los pequeños milagros de cada hora:
en el fuego de la poesía, en el
dorado vuelo de la danza, en
los latidos blancos de la música.
Amo a Dios y ausculto latidos
de su pecho en el flujo y reflujo
del mar sobre la playa, en la
dulce marea de luz de las
vidrieras, en el duro chasquido
del relámpago, en las calientes
nanas de la lluvia.
Amo a Dios porque, a la luz
del Crucificado, voy descifrando
rutas, atajos de salvación por
las oscuras sendas
del sufrimiento.
Amo a Dios y reconozco su
Voz, su Presencia por los
íntimos claustros del corazón.
Amo a Dios porque si no es
de Dios ¿de dónde me nace
la dulcísima primavera de amor
que estalla hoy por los
jardines de mi vida?
Amo a Dios y creo en Jesús
resucitado, de brazos
abiertos, corazón en ascua
y alas de Dios.
Amo a Dios y lo descubro
en la mirada azul del niño,
ventana pura por donde
se asoma el Padre de la Vida
y contempla con ternura su
creación.
Dios es Amor
Daniel Nuño
Dios es Amor, Verdad inconfundible.
Dios es Amor. Y es tal su inmensidad,
que ante su Amor no existe el imposible,
y al pecador le ofrece eterna Paz.
Indigno soy de que El en mí pensara.
Yo sé que no merezco su perdón.
Mas con su Amor me limpia y fiel me ampara.
Su Gracia tengo cual precioso don.
Dios es Amor, y lo es, de tal manera,
que a Su Hijo dio por mi alma redimir,
y en cruz murió para que yo tuviera
en su mansión, eterno porvenir.
Dios es Amor. Mas lo que no comprendo,
es que el mortal rechace su Bondad.
Desprecie el don de Dios, y esté escogiendo
su perdición por propia voluntad.
Dios es Amor, y mi alma lo celebra
dando alabanzas a mi Salvador.
Por su Bondad cambió mi suerte negra,
y hoy brilla en mí la lumbre de su Amor.
Gaspar Núñez de Arce
¡Grande privilegio !
Zaida C.de Ramón
¡Qué hermoso es obedecer
al Dueño del universo!
No merecemos tal honra
¡Es un grande privilegio!
Nuestro Dios en las alturas
es Soberano y Supremo,
es grande Su Majestad
Su gloria cuentan los cielos.
Todo aquello que creó
con Su palabra y con celo,
lo colocó en su lugar ?
Él vio que todo era bueno.
Mas aún, algo faltaba,
no podía obviar el resto,
Quería ser Padre de hijos
que le guardaran respeto.
Que caminaran con Él,
Le confiaran sus secretos,
Como al Padre que les ama,
Como Amigo en todo tiempo.
Entonces determinó
como Propósito Eterno
el darnos lo más preciado,
lo más valioso y perfecto:
Al que con sangre pagó
por tí y por mí ?¡Gran Misterio!
No menosprecies tal don
No ignores Su mandamiento
¡Obedecer al Señor
es un grande privilegio!
DESPARRAMANDO VIDA
Autor del Poema: Francisco Estrello
Tú vas, Señor, desparramando vida
En la pobre aridez del barro humano;
Todo surco regado por tu mano
Es viviente canción de rubio grano.
Tú conviertes la sed de pozos muertos
En fuentes refrescantes de aguas vivas;
Y los desiertos, Cristo, que cultivas,
Florecen en tus manos compasivas.
Llevas en Tí, Señor, todo el milagro
De los huertos en flor, llenos de trinos;
Y cuando pasas tú por los caminos,
Se estremecen de cánticos divinos.